Los inhibidores de transferencia de cadenas impiden la replicación del VIH en una etapa temprana, antes de que el ADN viral forme parte permanente del código genético celular. Estos ofrecen varias ventajas para el tratamiento del VIH:
En conjunto, estos beneficios proveen a los inhibidores de transferencia de cadenas la capacidad de cambiar el paradigma actual del tratamiento contra el VIH.